El laboratorio unificado de Navarra provoca las quejas de 83 de sus 90 trabajadores. 26.Septiembre 2014.

29 de septiembre 2014 Fuente: Diario de Navarra

“Ha sido una obra faraónica sin cimientos”. Con estas palabras los representantes de los trabajadores del Laboratorio Unificado de  Navarra (LUNA) resumían ayer en el Parlamento de Navarra su impresión ante este proyecto que persigue unir las analíticas de la red pública en un sólo lugar. “No estamos satisfechos”, apuntaron con rotundidad. Y así lo han rubricado en un escrito 83 de los 90 trabajadores que actualmente desempeñan su labor en este laboratorio.

Arancha Gorostidi (analista), Teresa Ahechu, Susana Catalán, Rosa Gallego (técnicos de laboratorio) y Mª Victoria Iroz (administrativa), en representación de los trabajadores, comparecieron ayer ante la comisión de Salud para informar del funcionamiento del LUNA. Y relataron numerosos incidentes (tubos rotos y perdidos, etc.); un “serio” problemas de infraestructuras, ya que la cadena del laboratorio “no tiene capacidad para manipular tantas muestras”; así como un incumplimiento en los plazos de implantación, ya que estaba prevista la puesta en marcha para enero de 2013. Todo ello, junto a continuas averías y un “insuficiente” servicio de mantenimiento, les llevó a manifestar su insatisfacción con el proyecto.

De esta forma, los trabajadores contestan a las palabras de la consejera, Marta Vera, que en Agosto afirmó que el laboratorio estaba  funcionando “a pleno rendimiento y plena satisfacción por parte de los profesionales”.

 Estamos desmoralizados y tristes. A pesar de ello hacemos un gran esfuerzo todos los días para que esto afecte lo menos posible a los pacientes”, indicó Gallego. “Hemos perdido la alegría y ya no vamos con el entusiasmo que íbamos a trabajar”, añadió.

 

Unificación

El LUNA es uno de los proyectos estrella de la legislatura de Marta Vera ya que, según los cálculos de Salud, permite ahorrar cerca de 6 millones de euros anuales, además de modernizar las instalaciones. El nuevo laboratorio, ubicado temporalmente en la primera planta del Centro de Investigación Biomédica, está diseñado para concentrar la producción de los seis laboratorios que había en el área de Pamplona y toda la Atención Primaria de Navarra. En Tudela y Estella quedarán los laboratorios para el análisis de las muestras de pacientes ingresados en los hospitales y de urgencias.

No obstante, hace dos semanas la propia Consejera reconoció en el Parlamento “retrasos y tensiones” en la unificación de los laboratorios así como “errores puntuales” que atribuyó a la “máxima complejidad” del  proyecto.

Ayer, los representantes de los trabajadores pusieron sobre la mesa un panorama bastante más oscuro. “Trabajar en un sistema en cadena no es algo que nos asuste, ya que algunas veníamos haciéndolo. Lo que no es fácil es ir a trabajar con peores medios de los que estábamos utilizando”, apuntó Gallego. Algunos trabajadores, indicaron, han formado parte de los grupos que se constituyeron para trabajar en este proyecto. Y allí plantearon los problemas que iban surgiendo. Sin embargo, “dejamos de ir a las reuniones porque era una pérdida de tiempo mientras se acumulaba el trabajo en el laboratorio”.

 En este sentido, Gallego afirmó que la “sensación” de los trabajadores es que quien marca las directrices del proyecto es la empresa adjudicataria, el laboratorio Abbott. “Tenemos el sentimiento de que no se ha valorado la opinión ni experiencia de los profesionales”,dijo.También existe una “falta de estructuración adecuada y equilibrada de los puestos de trabajo” así como falta de formación para conocer las nuevas máquinas.

 

La plantilla no pone en duda la fiabilidad de las analíticas

 

La fiabilidad de las analíticas está fuera de duda. Así lo indicó ayer Rosa Gallego, portavoz de los trabajadores del Laboratorio  Unificado de Navarra (LUNA). “El problema es más de capacidad y de infraestructura”, indicaron.

Pérdida de tubos. Uno de los problemas es la pérdida de tubos con muestras, lo que supone que el paciente debe repetir la analítica.

Según indicaron, “en el último mes desaparecieron 6 tubos después de haber realizado alguna determinación”. Ahora se pierden menos que hace tres meses pero “la pérdida actual de tubos es 36 veces mayor. Anteriormente no desaparecían más de dos tubos al año de una media de 1.000 hemogramas diarios”. Para evitar problemas, los trabajadores indicaron que cuando llegan a la mañana buscan entre los cables por si hay algún tubo.

Retraso en el trabajo. Según los trabajadores, con el nuevo sistema el trabajo se retrasa. Antes, para las 15 horas terminaba el 99% de la actividad. Ahora, añadieron, hay personal que debe trabajar por la tarde para terminar, a pesar de que todavía no ha culminado la unificación y falta la hematología de Atención Primaria y de los hospitales. Este retraso influye a la hora de que los facultativos tengan los resultados analíticos, apuntaron.

Cadena muy larga. La cadena en la que se procesan las muestras es “muy larga”. “No centrifuga el número de muestras que le llegan para que sea ágil”, ni almacena todas las muestras. En definitiva, “no está dimensionada para las muestras que se procesan y por las frecuentes paradas retrasa los resultados”, apuntaron.

Mantenimiento. A juicio de los trabajadores fue “insuficiente” hasta la llegada de la bioquímica del Hospital de Navarra. “El personal  técnico de mantenimiento de Abbott y los informáticos estaban desbordados y no daban soluciones a los problemas diarios”. Además, las averías son continuas (esta semana todos los días) y hay poca comunicación entre las actuaciones del servicio técnico y el personal.

Urgencias. Los trabajadores consideran “especialmente graves” las averías en el laboratorio de respuesta rápida (urgencias). “Se han llegado a quedar con los dos autoanalizadores de hemogramas estropeados”. Los resultados no se transmitían automáticamente y se pasan a mano, con riesgo de errores. “No es puntual. Ocurrió el pasado fin de semana”.

Informática. Existen varios programas informáticos intermedios con conceptos diferentes en la forma de trabajo. “Ha originado problemas”, dijeron.

Condiciones de trabajo. Indicaron que existe “un nivel de presión” muy alto y que las distancias son muy grandes. “Sufrimos la  presencia de quienes están instalando aquello que falta o falla en los espacios de trabajo”.